Certidumbre, estabilidad, experiencia y trabajo
08/09/2016 | Jose Antonio Suso
Dentro de unas horas arrancará la campaña electoral en Euskadi, aunque llevamos ya meses imbuidos en estrategias partidistas de las que debemos de alejarnos. Unos con las inhabilitaciones y otros con el bloqueo institucional y político en Madrid, tratarán de desviar la atención sobre lo que debe de ser el objetivo de esta campaña, que no es otro que el de plantear nuestras propuestas y explicarlas a la ciudadanía. Mirar a Euskadi y no al caos de Madrid ni a Otegi. Unos y otros nos ocultan sus programas, pero nosotros lo tenemos ya sobre la mesa. Nuestra hoja de ruta es clara y también nuestra meta: trabajo, esfuerzo y compromiso para que Euskadi siga avanzando por la senda del desarrollo. Queremos una Euskadi al servicio de las personas, una Euskadi con un futuro mejor y con un crecimiento humano y sostenible. Y para ello, no hay recetas mágicas. Sabemos que los partidos lanzan estridentes promesas carentes de todo realismo. Nos ofrecen el oro y el moro y se lanzan a una carrera por ver quién da más, y todo ello sin ningún esfuerzo.
EAJ-PNV tiene su mejor aval. Un candidato que cumple la palabra dada y que ejecuta los compromisos adquiridos. Lo decía Iñigo Urkullu ayer en Vitoria-Gasteiz: “Comprometo mi palabra que es lo más sagrado que tengo”.
Hace cuatro años el Lehendakari compartió un compromiso con la sociedad vasca. Eran tiempos complicados, estábamos en medio de una brutal crisis económica y los recursos no llegaban para hacer grandes proyectos. Dijimos entonces que el recorrido sería largo y duro, y no mentimos. La verdad siempre por delante y también la realidad. Esos cuatro años han pasado y gracias al esfuerzo y el trabajo compartido, este país avanza hoy por el camino de la recuperación y el crecimiento, manteniendo a salvo los servicios públicos esenciales.
Las bases están puestas y queremos seguir desarrollándolas. Llevamos muchos trimestres de crecimiento sostenido, 10, y se está creando empleo, poco a poco, pero sin interrupciones. Se ha trabajado mucho y se ha dialogado mucho también. Pero no somos conformistas , sabemos que quedan cosas por hacer, tenemos deberes pendientes, y por eso hay que seguir luchando. Día a día, con el mejor equipo, y con el mejor capitán. Urkullu es la garantía, es la experiencia, la capacidad demostrada y la gestión rigurosa. Es el mejor candidato para que este pueblo siga progresando y no se pare. Euskadi está hoy en la certidumbre y la estabilidad, Euskadi no quiere incógnitas ni espectáculos que desacreditan a quienes los protagonizan. Tenemos una nueva oportunidad para demostrar que somos diferentes. Miremos a Euskadi con la esperanza de que lo que queda por venir será mejor. Tenemos equipo, tenemos proyecto propio y tenemos a la persona capaz de hacer de Euskadi un país cada vez mejor.