Magia y Política

05/01/2017 | Jose Antonio Suso

rss Ezagutzera eman
Magia y Política

DESCARGAR IMAGEN

  • “Hago mío el discurso del Lehendakari en fin de año, y ratifico la apuesta de EAJ-PNV por el diálogo, la negociación y el acuerdo. La mejor manera de asegurar un futuro mejor es recorrer el camino conjuntamente, pactando y sin imposiciones; y no dejando a nadie atrás. Pido a todas las formaciones, a la mía también, que incrementemos la cooperación y el diálogo para acelerar las mejoras que la sociedad vasca se merece”

  • “En Araba y Gasteiz, apelo a la responsabilidad de todas las fuerzas políticas para poder disponer en 2017 de unos buenos presupuestos que aumenten nuestra capacidad de gasto y permitan desarrollar proyectos en beneficio de todas y todos. Queremos un territorio de progreso, cohesionado y que dote de servicios a todas las personas con independencia de donde vivan o trabajen”

  • “La prioridad para el año que arrancamos será el empleo. Durante la crisis hemos perdido puestos de trabajo, en número y calidad. La recuperación de esos empleos perdidos es una necesidad imperiosa para una sociedad que quiere avanzar en desarrollo humano y sostenible”

  • “El diálogo y el acuerdo serán la base fundamental para avanzar hacia una mayor profundización de nuestro autogobierno. Más autogobierno será más bienestar y más equilibrio social”

Pertenezco a una generación en la que el día de mayor ilusión era el de los Reyes Magos. El tiempo, la evolución de nuestra sociedad y la democracia recuperaron viejas tradiciones culturales casi olvidadas, como el Olentzero. Si mis hijos depositan su esperanza en el carbonero que baja del monte en navidad, para mí seguirán siendo sus magas majestades quienes encarnan los sueños y los deseos, sin que por eso dejé de apuntarme con ilusión a nuestro Olentzero.

Era tradición escribir una carta a los Reyes Magos, enviarla por correo o como fuera y esperar a que lo allí solicitado apareciera, como por arte de magia, en la mañana del 6 de Enero. Siendo hoy la víspera, el momento de finalizar las solicitudes y comenzar a confiar en que se cumplan los sueños, he pensado en trasladaros a todas y todos mis deseos para este año que acaba de comenzar.

Por un lado, quiero hacer mías las palabras que nos trasladó el Lehendakari el día de nochevieja y apelar a que los principios de actuación para nuestro inmediato futuro sean el diálogo y el acuerdo. La mejor manera de configurar una sociedad equilibrada, que se desarrolle por sendas de serenidad y se aleje de crispaciones que solo persiguen retardar nuestro propio desarrollo, es la de recorrer el camino conjuntamente, decidiendo de manera pactada y sin imposiciones en cada momento. No solo lo iremos abordando conjuntamente, sino que lograremos uno de mis mayores deseos para los próximos tiempos: que nadie se quede atrás y que avancemos hacia mayores cotas de bienestar conjuntamente, solidariamente. Más importante que la velocidad con la que queramos prosperar, es que la sociedad avance colectivamente. Que lleguemos todos juntos a la meta sin arrinconar a nadie.

Si esto nos lo aplicamos en Araba y en Gasteiz, mis deseos para esas mayores cotas de bienestar se refieren, lógicamente, a la necesidad de poder disponer de presupuestos que aumenten la capacidad de gasto del pasado año y que permitan desarrollar proyectos de los que nos beneficiemos todas y todos. Que avancemos en un plan de movilidad más moderno y equilibrado, que generemos empleos de calidad y que Araba camine por la senda del equilibrio territorial, dotando de servicios a todos y a todas independientemente de donde vivan y donde desarrollen su trabajo profesional. Y eso lo lograremos con el diálogo, el pacto y la colaboración.

Si bien las cosas han mejorado de unos años a esta parte y, aunque como el pasado día señalaron los empresarios vascos, hemos llegado a las cotas de PIB previas a la crisis, nos hemos dejado algunas cosas importantes por el camino. Hemos perdido empleos en número y en calidad. La recuperación de puestos de trabajo y su calidad son necesidades imperiosas para una sociedad como la nuestra, que quiere avanzar al unísono hacia mayores cotas de desarrollo económico y humano. Esa es la más importante solicitud a los Reyes Magos para este año.

Al tiempo, ese diálogo y acuerdo que solicito, deben ser la base para el avance hacia mayores cotas de autogobierno, que no es otra cosa que un sinónimo de mayor bienestar y mayor equilibrio social. Trabajar conjuntamente para profundizar en nuestro autogobierno y autoconfianza y ser capaces de enfrentarnos como sociedad a los problemas que el destino nos presente, son las mejores maneras de asegurar un futuro mejor de bienestar en una sociedad ponderada. Mayores cotas de bienestar, más y mejores empleos, desarrollo del autogobierno, y todo ello basado en el acuerdo y el diálogo, esta es mi carta para sus Mágicas Majestades.

Y parándome a pensar en mi escueta pero profunda solicitud, caigo en que las cosas no se pueden quedar así, que a estas alturas no podemos pedir las cosas y quedarnos de brazos cruzados a esperar que los Magos nos las concedan como si de niños se tratara…o de algunos políticos que piden y no aportan.

Si pido lo que creo más prioritario, independientemente de lo que pueda hacer la magia, sé que su consecución dependerá de lo que hagamos los demás. En ese sentido, pido a todas las fuerzas políticas que pongan lo que mejor tengan de su parte para incrementar la cooperación y el diálogo, y así acelerar las mejoras que la sociedad vasca se merece.

Podemos pedir a Sus Majestades que nos traigan más y mejores empleos, pero si ese deseo no lo convertimos en la prioridad de todas las administraciones y de todas las fuerzas políticas, si no incrementamos el diálogo entre partidos y la cooperación interinstitucional, la magia se quedará corta.

Desde estas líneas pido a los Magos que, desde donde estén, nos echen una mano, pero creo que nuestro esfuerzo de entendimiento y mano tendida a la negociación, y yo me ofrezco el primero, deberá ser la base para lograr una sociedad vasca con más empleo, más autogobierno, más equilibrio…y más feliz.

Ah!! Se me olvidaba!! Gracias por escucharme. Sé que somos muchos los que estos días os pedimos que arregléis este mundo loco en el que nos toca vivir. No perdamos la ilusión!!