La década de los años 60 vio multiplicar el trasvase de población del campo a la ciudad que contrastaba con aquel “me voy `pal´ pueblo que la ciudad yo ya no la quiero” de Manolo Escobar, uno de los hit parade del momento en las emisoras de radio.

Como cualquier otro, fue la búsqueda de una mejor calidad de vida el origen de aquel feroz movimiento migratorio que puso en cuestión el futuro de lo rural. Despoblamiento y dotación de servicios circulando por una especie de vasos comunicantes. Allí donde aumentaba la población, se incrementaba el número de servicios. Allí donde disminuía la primera, entraban en retroceso los segundos. Vitoria-Gasteiz, que acogió buena parte de la población venida al y del Territorio, centralizó la prestación de un buen número de servicios dirigidos tanto a la vecindad gasteiztarra como a la alavesa.

Con los años, con trabajo y con presupuesto esta situación está revirtiendo en virtud del compromiso de las instituciones para dotar a los pueblos de Alava de un nivel de servicios y prestaciones que equiparen, proporcionalmente, su calidad de vida con la de la capital. Para que todos los alaveses y las alavesas tengan las mismas opciones con independencia de dónde vivan. En definitiva, para conseguir un territorio equilibrado.

En la actualidad todas las comarcas alavesas disponen de unos centros de salud de última generación, tanto para la atención primaria como para determinadas especialidades. Centros sanitarios punteros como los recientemente inaugurados en Kanpezu y Amurrio así como el que en breve abrirá sus puertas en Murgia. El ejecutivo Urkullu también se ha esmerado en la construcción de un nuevo centro de secundaria en Nanclares y en realizar mejoras de alto calado en las infraestructuras educativas de los municipios de Agurain, Dulantzi, Arrazua-Ubarrundia. En ejecución, el proyecto de un nuevo centro para Zuia.

El sábado pasado se daba un paso más en materia de equilibrio territorial con la inauguración del Parque Central de Bomberos de Álava “Fernando Martínez de Ilarduya”, ubicado estratégicamente en Nanclares de la Oca. Desde el comienzo de esta legislatura Diputación Foral de Alava entendió que debía dar un salto cualitativo en la prestación del servicio de prevención, extinción de incendios y salvamento en todas las Cuadrillas alavesas, hasta hace poco centralizado en Vitoria-Gasteiz. Diputación cumple así uno de sus principales objetivos de la legislatura con la apertura de este Parque Central, que dará cobertura adicional a las UCEIS comarcales. Unas instalaciones que han costado 1,8 millones de euros y desde las que se ofrecerá un servicio de garantía las 24 horas del día para la totalidad del Territorio garantizando la seguridad de los y las alavesas.

En la cartera foral, un segundo reto para el que se está buscando una solución definitiva: superar la brecha digital, la diferencia que las diferentes comarcas y localidades alavesas tienen a la hora de acceder a las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación que, en nuestro tiempo, se convierte en una desigualdad entre los y las ciudadanas alavesas.

Este será otro paso, un paso más para que territorio y capital mantengan un equilibrio en la prestación de unos servicios dirigidos a las personas. Hablaremos de ello, cuando esté más desarrollado.