LA GINGA DEL PNV

24/05/2018 | Jose Antonio Suso

rss Ezagutzera eman
LA GINGA DEL PNV

DESCARGAR IMAGEN

Quien me conoce sabe que no soy futbolero. Pero siempre me ha llamado la atención la historia del debut de un casi-niño Pelé en la selección de fútbol brasileña durante el Mundial de 1958. Una selección sobre la que pesaba como una losa el estrepitoso fracaso sufrido en la final del anterior campeonato. Una selección dividida entre los jugadores que querían aplicar las técnicas de fútbol europeas y aquellos otros que, como Pelé, basaban su forma de juego en las raíces de su pueblo.  A eso le llaman “ginga”, el juego bonito. La ginga se convirtió en el elemento y método que dio cohesión aquella amalgama de jugadores que alzó la copa de aquel mundial de fútbol en Suecia.

El pasado fin de semana una columna de opinión, publicada en un medio de comunicación, ponía en cuestión el peso del nacionalismo en el entramado social alavés. Anunciaba que EAJ-PNV había empezado a tocar tambores de guerra para garantizarse “la victoria” en los próximos comicios forales, mediante la presentación de una propuesta de modificación de la ley electoral de Juntas Generales, y para “buscar el control” de la Cámara de Comercio y del SEA. Por último, auguraba un final con aroma a fracaso que ya se empezaba a percibirse.

El germen de mi vinculación con EAJ-PNV, como para los más de 2.000 alderdikides alaveses, está en los epítetos que acompañan a las siglas de la formación política que representamos. Somos un partido democrático, plural, participativo, aconfesional y humanista, abierto al progreso y a todos los movimientos de avance que mejoren la calidad de vida de las personas.

En definitiva, compromiso con la sociedad. Una sociedad, la vasca y la alavesa, de la que formamos parte per se. Una sociedad con la que hemos firmado un contrato responsable en clave de propiciar su desarrollo continuado, aprovechando y potenciando sus virtudes, sin dejar pasar la mínima oportunidad, bien las que generemos nosotros bien las que nos concedan otros o las circunstancias. Todas para hacer revertir a la sociedad cualquier tipo de beneficio.

Sorprende que se intente confundir esta actuación, la “ginga del PNV”, con otro tipo de intencionalidad como la que subyace bajo la expresión “extender los tentáculos de poder”. Me sorprende incluso más que el columnista conceda esa especie de patente de corso que parece afectar en exclusiva a EAJ-PNV.

Respeto la opinión que se traslada. Pero opinión es opinión siempre y cuando por el camino no se pretenda elevarla a categoría de dogma.