Finaliza el curso político. En Araba los y las alderdikides del Partido Nacionalista Vasco lo hacemos con la proclamación de candidaturas a diputado general y alcalde de Vitoria-Gasteiz.

Con la Asamblea Territorial que celebraremos este sábado finaliza un proceso electoral del que extraemos, a modo de titular, la siguiente conclusión: EAJ-PNV revalida su confianza en Ramiro González y Gorka Urtaran para encabezar las candidaturas jeltzales a la Diputación Foral de Álava, el primero, y al Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz, el segundo. Con argumentos.

Ramiro González ha impregnado la Diputación Foral de Álava de una nueva forma de hacer política. Creía, y cree, en las potencialidades del territorio y en las capacidades de alaveses y alavesas. En 2015 absolutamente apagadas por el tamiz gris de un anterior gobierno que se caracterizó por el inmovilismo, por el encefalograma plano.

Han pasado tres años y Ramiro González ha conseguido sacar adelante proyectos claves para el futuro y recuperar ilusión y orgullo para Álava. Avances y hechos sustentados en la escucha, el diálogo y el acuerdo.

Es vital que Álava siga teniendo como líder a Ramiro González que ha demostrado que quiere Álava, que conoce cada rincón de Álava y las necesidades de sus gentes. Tiene muy claro qué hacer para convertir nuestro territorio en referente.

Gorka Urtaran ha cambiado la ciudad en el fondo y en las formas. En materia de convivencia hemos pasado de un discurso que apelaba a los miedos a las personas, establecía diferencia entre ciudadanos de primera y de segunda y generaba fractura y conflicto social, a una acción política en la que todas las personas tienen los mismos derechos y obligaciones.  

Frente a un agujero económico de 68 millones de euros y una de las deudas más altas de los municipios vascos que dejó el PP, este gobierno municipal está revirtiendo la situación de forma sensible. La atención a los barrios se plasma en más de una treintena de obras que, además, cuenta con el valor añadido de haberse planificado de forma consensuada con el vecindario.

El impulso a la movilidad –con fuerte presencia de un transporte público moderno, eficiente y eléctrico- y la apuesta por la bicicleta son otras señas de identidad del modo de actuar del alcalde.

Y, por fin, la ciudad tiene una estrategia, una hoja de ruta, un proyecto de ciudad, algo no ocurría desde hace mucho. El alcalde Urtaran ha puesto en marcha Vitoria-Gasteiz para lograr una ciudad más moderna y competitiva, preparada para el siglo XXI.

Sin el ánimo de parafrasear el título de aquella canción. Dos hombres con un mismo objetivo: impulsar Vitoria-Gasteiz, impulsar Araba.