LAS “ZONAS BLANCAS” SE VAN A ACABAR
04/10/2018 | Jose Antonio Suso
Con el inicio de la legislatura Diputación Foral de Álava se implicó hasta las cachas en la puesta en marcha de una de las propuestas electorales estrella de EAJ-PNV: Araba Conectada. Un ambicioso programa no exento de dificultades técnicas por superar y de un importante esfuerzo inversor a realizar. Un reto en toda regla para llevar hasta el último rincón del territorio alavés internet de alta velocidad en clave de equilibrio territorial y justicia social.
El programa ha empezado a dar sus frutos. Tanto el diputado general, Ramiro González, como la diputada de Equilibrio Territorial encargada del desarrollo del proyecto, Pilar García de Salazar, nos aseguraban esta semana que en octubre de 2019 podremos acceder desde cualquier punto de la geografía alavesa a internet de manera estable y rápida a una velocidad que oscilará entre los 100 y los 600 megas, pudiendo llegar a un giga en casos concretos. Será Alava el primer territorio del Estado y uno de los primeros de Europa en tener cubierto un despliegue integral de estas características. Yo mismo en la casa familiar de Maeztu tengo ya la posibilidad de tener una conexión de la misma calidad que la que disfrutamos en Vitoria-Gasteiz.
Una forma de acercar el derecho de todos los ciudadanos a unos medios y condiciones de vida, independientemente del lugar donde residan en nuestro Territorio, en definitiva, de su derecho al acceso a los recursos públicos.
En el camino se ha superado el escaso atractivo comercial de los operadores de telefonía para dotar de los mimbres necesarios a una Araba dispersa con puntos negros en cuanto a densidad demográfica. Asimismo se ha obtenido la colaboración del Gobierno Vasco en materia inversora con una dotación de 10 millones de euros para toda la Comunidad Autónoma, de los que Araba se ha beneficiado en un 72%. Una apuesta más del Gobierno vasco con Araba y del lehendakari Urkullu.
Mejoras para el territorio que han supuesto acercar al mundo rural una tecnología digital que andaba a pedales y suponía estar en condiciones de inferioridad con respecto a los núcleos urbanos, en un momento en el que todo está al alcance de nuestras manos con un solo click. Más que nunca la sociedad se rige por las reglas de lo virtual. En cualquiera de sus ámbitos: relaciones sociales y laborales, consumo de ocio o como trending topic en materia de comunicación. Operar con nuestras cuentas bancarias, solicitar consulta médica o acceder a nuestro expediente académico pasa por la Red de redes. Si quieres enviar un mensaje utilizas whatsapp para desgracia del socorrido post-it o de aquel olvidado invento llamado fax. Encargar la impresión de tarjetas de presentación ha quedado relegado con la aparición de Linkedin. Se recurre a Google Maps para encontrar cualquier ubicación en una localidad desconocida. Infojobs sustituye a cualquier agencia de empleo. Y así con otros miles de temas más que la Red ha democratizado y están al alcance de cualquier ciudadana y ciudadano.
Con Araba Conectada se han abierto posibilidades de servicios que trascienden el ámbito de lo personal-particular y se convierten en imprescindibles para el mundo de la empresa y de los servicios. También los institucionales, como los sociosanitarios, que permitirán actuaciones sin necesidad de un desplazamiento a Vitoria-Gasteiz, que ahora es irremediablemente necesario. Posibilidades que los y las “urbanitas” disfrutábamos desde hace tiempo con solvencia.
Se supera con nota una asignatura pendiente en Araba. Un territorio conectado en el que desaparecerán en breve las “zonas blancas” carentes de cobertura para voz y datos. De ello depende nuestro bienestar, nuestro desarrollo económico y social integral y, por tanto, el futuro de Alava.