Decir que el clima político madrileño está enrarecido desde hace tiempo no es ninguna novedad. Sería un buen momento para que Javier Vizcaíno retomara con reducida periodicidad su suculento “Cocidito madrileño”. Material no le iba a faltar para cocinar un producto de digestión pesada.

En ese tótum revolútum reina “el todo vale” con imperio del verbo grueso, de la zancadilla y de la bravuconada. Más ahora, en periodo preelectoral. Un momento idóneo para hacer balance y rendir cuentas ante el electorado de la actuación mantenida en el Congreso de los Diputados.

Este martes acompañe a Mikel Legarda y resto de candidatos y candidatas de EAJ-PNV al Senado y al Congreso junto al portavoz del grupo vasco en la Cámara Baja, Aitor Esteban, al diputado general de Álava, Ramiro González, y a otros responsables institucionales.

Con el aeropuerto de Foronda de fondo, en Estarrona sobrevolaron dos ideas nucleares. La primera, EAJ-PNV como garantía del cumplimiento de lo que promete. La segunda, EAJ-PNV como alternativa electoral lógica con el doble valor añadido de defender en exclusiva los intereses de Álava.

Álava y Euskadi en Madrid y la necesidad de hacer política contra la involución que proclaman, ya sin disimulo, los partidos políticos alineados con el eje ideológico de una derecha cada vez más rancia.

El diputado Legarda, aspirante a revalidar escaño, lo conoce bien de cerca. El martes defendió la capacidad de acuerdo de EAJ-PNV y puso en valor los 5 votos del grupo vasco en Madrid. Cinco votos de 350 con un índice de productividad incomparable. Sobre todo, si lo comparamos con el aportado con otros representantes vascos en el Congreso que han pasado estas legislaturas incompletas jugando, unos, a esconderse para aparecer y desaparecer tras las columnas de hemiciclo a conveniencia; y, otros, diluidos en grupos de mayor dimensión numérica pero con el ojo puesto en intereses ajenos a lo vasco.

Legarda puso de manifiesto, con hechos, que EAJ-PNV cumple lo que promete. Así ha propiciado el cierre de Garoña; ha arrancado un compromiso firme para soterrar las líneas ferroviarias en Vitoria-Gasteiz; ha logrado igualar unas injustas tarifas eléctricas que penalizaban a nuestra industria; ha conseguido una mejoría  en las pensiones, con mayor incidencia en las de viudedad; ha mejorado nuestro Concierto Económico; ha cerrado un acuerdo para el Cupo por un periodo de 5 años, tras 10 años de desacuerdo; ha conseguido la trasferencia de la A1 y se trabaja en la de la A 68; ha traído el H24 que se implantará el próximo mes en el aeropuerto alavés así como una serie de mejoras en la terminal dentro del compromiso para que Araba se conecte mejor al mundo y para mejorar la calidad de vida de alaveses y alavesas, para fomentar el eje logístico de nuestro territorio con incidencia directa en el incremento de la competitividad empresarial y, así, en la generación de riqueza y desarrollo.

El objetivo para el 28 de abril está definido. Seguir siendo fuertes en Madrid. Seguir siendo la voz que defiende los intereses alaveses y vascos en Madrid y lo seguiremos haciendo en exclusividad como ha quedado demostrado.

EAJ-PNV como garante para conseguir una Araba cohesionada, fuerte y equilibrada.